Día 314: We are getting solid.

Me acabo de dar cuenta por primera vez de que mi ordenador coge señal en el jardín de mi casa y yo sin saberlo. Contemplar una de las mejores vistas del Pacífico mientras escribo esto es una buena sensación, para qué negarlo. Es 15 de junio, y la mitad de estudiantes de intercambio gallegos que conozco están regresando a las tierras españolas ahora mismo. A mí todavía me quedan dos semanas escasas aquí, y como me prometí hace dos semanas, estoy haciendo de este último mes el mejor de todos. Si ya no paraba quieta antes, esto ya está pasando el límite. Pero soy una adolescente, y eso conlleva a la palabra diversión, aunque la contrarreloj te ponga entre la espada y la pared. Desde el viernes pasado hasta hoy, miércoles, he dormido 28 horas. Mientras lo normal para mí sería el doble de horas. Pero supongo que la acumulación de sueño también es otra cosa que un adolescente debe de soportar. De una forma o de otra, no solo disfruto de la luz del día, sino tambíen de la luz de las estrellas. La fiesta de Graduación de mis tres mejores amigas el sábado pasado fue mucho mejor de lo que esperaba; y sorprendentemente no desprendí ni una lágrima en la Graduación el lunes. Creo que es lo único que probablemente le haya faltado a mi año, conseguir graduarme en los Estados Unidos y obtener un diploma, pero bueno.. supongo que no todo pastel puede tener su guinda. Las cientos de fotos guardarán el recuerdo. El significado que le dan a la graduación de segundo de bachillerato es el de intentar conseguir "the American dream", el de entrar en la que es la vida de verdad y el de madurar hasta conseguir tu meta. Probablemente no hubiera estado de acuerdo hace ocho meses con muchas de las cosas de las que hablaron, pero ya sabes que hay muchas cosas que han cambiado mi forma de pensar este año y básicamente estuve de acuerdo con todo. A pocos días de acabar el colegio, me he permitido lo de faltar hoy, sinceramente no quiero volver a dormirme en clase de literatura ni tampoco pasarme la hora firmando anuarios escolares en clase de biología. No tenía pensado sacar fruto de esto, pero de algo si que me he dado cuenta. Estamos aquí por muchas razones. E igual nunca sabremos muchas de ellas. Pero aunque no tengamos el poder de elegir de donde venimos, todavia podemos elegir a donde queremos ir a parar. Todavía hay cosas que podemos hacer. Y podemos intentarlas aunque no siempre las consigamos: Mi ilusión de tirar el sombrerito una vez graduada no se ha cumplido realidad.

(julio 2011, lets go ladies)