miércoles, 29 de septiembre de 2010

Día 63: A veces no te das cuenta de dónde estás hasta que observas el mapamundi.

Mi enfermedad ha desaparacido, e iba siendo hora. Supongo que no te importará, pero ya me estaban jodiendo los malditos dolores de cabeza. ¿Quién habrá sido el listo de crear la cámara de fotos? Si lo piensas, suena imposible que puedas capturar algo que te guste y guardarlo para el recuerdo, no crees? Hoy en clase de fotografía me he dado cuenta de todo lo que ha avanzado la tecnología, y no porque tenga decenas de ordenadores Mac en clase, sino porque me he pasado la hora en la habitación oscura. Sí, esas en las que se solían revelar fotos no hace más de ocho años atrás. En las que metes el papel en cajas llenas de sustancias para conseguir la imagen que querías. Esta clase me está sirviendo mucho más que para hacer el tonto con Elyse, Kelsey y compañía. El examen de Biología de hoy fue bien. Me empieza a gustar esto de estudiar lo mínimo al cuadrado y que surja efecto. Lo que no me gusta un pelo es tener que estar haciendo un trabajo con dos tipos en clase de Historia mientras ellos sólo se dedican a hablar de no se que mierdas de fases de videojuegos frikis. Sí, lo que viene siendo friki. Me enerva, te juro que me enerva. Que no me hace gracias estar tomando apuntes de unos textos contradictorios sobre la Revolución Americana mientras ellos se rien como mongolos y no sacan ni punta al lápiz. Bueno, y parece que mi querido profesor de American Literature tiene pasión por la música jazz, porque en cuánto le solté que el domingo había estado en el concierto de Harry Connick cerca de Seattle, me tuvo 15 minutos haciéndome preguntas sobre él.
Mi club de español va sobre ruedas, esta semana empezaré a vender 13 tipos diferentes de palomitas para ganar dinero para un baile que vamos a organizar en Halloween.
Me muero de ganas de que empiece el fin de semana, no daré señales de vida hasta el domingo mínimo. El sábado me toca excursión a Mount Rainer con mi grupo de estudiantes de intercambio internacional y el coordinador local. Si a eso le sumas que me acoplo viernes y sábado a casa de mi amiga catalana a media hora de aquí, no puede ser mejor.
Una de estas fotos podrás comprobar que no es Oak Harbor, no. Sino Vigo. Y no es que lo sepa por los edificios, sino por el pequeño detalle de las Islas Cíes al fondo. Extraño esas vistas. Y las extraño porque son desde la casa de mi pequeñita. De esa que va a venirse a Seattle con su papá. De esa que es como una hermana pequeña para mí.

lunes, 27 de septiembre de 2010

Día 61: Homecoming, ese baile de las películas con ponche.

Toda la historia que os había contado de la Spirit Week terminó el viernes con el Homecoming game. Conseguí disfrazarme otra vez más de lila y dorado, pero sin llamar mucho la atención. Los constantes "Go wildcats!" y "Make some noise" surgieron efecto y ganamos.
Y.. lo que todo el mundo esperaba ansiosamente durante toda la semana llegó. Homecoming. Uno de los bailes más importantes del año. Vestidos, flores, dates.. Y sin coña, eso fue peor que Fin de Año en España. Me pasé dos santas horas del sábado en un salón de manicura y pedicura, pero por un momento me sentí en el paraíso. Peinados, maquillaje, fotos y cena. Cena en la que pensé que igual no cabría en el vestido nunca más. La experiencia en general fue como el desenlace de esas películas en el que todo el mundo aparece en el High School con sus vestidos, las oscuridad se resalta con las luces de colores y hay unas mesas llenas del típico ponche y comida. Más comida. ¿Comida?. Comida que, por supuesto, no comí. Todos locos. El baile acaba como en las películas Disney, como en Cenicienta, a las 12. Qué locura eh, jaja.. Con razón cuando les digo que a esa hora aún no ha empezado la fiesta en España, flipan. Después de Homecoming, tuvimos sleepover en casa de Emily y tomamos el "breakfast". Sí, breakfast a las 2 de la mañana. Yo también pensé que era de lo más raro que había escuchado. Pero dime tú de donde viene la tradición de desayunar chocolate con churros el 1 de enero.
En general estuvo bien, como digo, nada del otro mundo. Que no le llega a fin de año ni a la suela de los zapatos. Pero estoy en América. Aquí no se sale hasta las 8 de la mañana, aquí no hay discotecas nocturnas para adolescentes y aquí el alcohol no está permitido hasta los 21 años. Pero una de las cosas que me está enseñando esto es que nos tenemos que conformar con lo que tenemos, porque siempre nos quejamos, pero en realidad.. la mayoría de las veces no tenemos por qué hacerlo.

Fotos de Homecoming y Homecoming dance.

PD: Tengo en mi posesión un nuevo móvil americano. Creo que tendrán que pasar generaciones para que estos lleguen a España. Por cierto, he cambiado de número.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Día 57: The sky is the limit

Achús. Ya tardaba en ponerme enfermilla, si es que hay cosas que no cambian. Hoy casi me duermo en clase de Biology, y no por el aburrimiento, sino por mi retumbante dolor de cabeza. Bueno, he descubierto que la pequeña dificultad que tenía el colegio (el inglés), empieza a convertirse en algo menos significante. El caso es que me di cuenta en el examen de US History, yo de verdad no sé como carajo conseguí un 19/20, pero lo hice. La gracia es que fue la mejor nota. Creo que mi estudio se basó en leer durante media hora la Constitución y la Declaración de Independencia. Not such a big deal. Lo mejor es que la madre me dijo que estaba muy orgullosa de mi, y que me lo merecía porque habia estudiado mucho, que ella nunca ve a sus hijas estudiar como yo lo hice. Mi respuesta fue rápida y directa: "si estudias eso en España no llegas al 2". Jajaja, es que es verdad. Mira que son vagos, no saben lo que es bueno. El quiz de Algebra muy bien y la clase de fotografía empieza a hacerse más interesante. Me encanta mi querido profesor Einstein de Drawing. Creo que ya lo había dicho. Es que mola más jo. Y me dio pena, me dio pena cuando hace cuatro años dejé de dibujar y pintar, porque verdaderamente me gustaba y se me daba bien. Sino, pregúntenselo a mi querida señora madre. Pero el caso es que en esta clase me he dado cuenta de lo mal que hice en dejar de hacerlo, porque en serio que he flipado al ver mi proyecto 3D terminado. Intentaré traerlo a casa para sacarle una foto. Y bueno, mañana es el día Super spirit purple&gold, y todavía no se que le robaré a mis hermanas para ponerme. Más les vale ayudarme, me veo muy perdida. El sábado el baile de Homecoming, ya os informaré.
Y jolín, que os echo mucho mucho mucho de menos.

sábado, 18 de septiembre de 2010

Día 52: Cómo encontrar un vestido de Homecoming no hortera en 5 horas

Toooma, saqué una A+ en un examen de Drawing. Mira tú que bien, y encima a este señor tan peliculiar que os contaba que era cual Einstein le caigo genial. Hoy cuando repartía cosas para el nuevo proyecto de dibujo, me pasó un Twist por debajo y me dijo, esto para ti, que no pareces muy feliz hoy. Más majo! jajaja
Aún hoy los profesores se siguen enterando que soy estudiante de intercambio de España, y todavía hoy la gente sigue intentando ser simpática conmigo diciéndome "Hola, cómo estás?". Lo único que espero es que mi acento al hablar inglés no sea el mismo que el suyo cuando intentan hablar español, porfa.. jaja. Las malas noticias llegaron cuando hoy me dicen que el miércoles tengo dos exámenes, mates y mi gran amigo: HISTORIA. Y la verdad no sé por donde empezar, si por el preámbulo de la Declaración de Independencia o por los artículos de la Constitución, la gracia es que son nosecuantas páginas y tengo dos días. Y por si fuera poco, escríbeme tú una Declaración de Independencia que refleje cómo actúan en mí los derechos de la Consitución americana para mañana. Ai Dios, ¿ves? esta es la parte que no me gusta. Explícame por qué tengo que ponerme a inventar (porque es lo que haré) ideas sobre una Constitución que ni si quiera es la mía. Porque claro, aquí serán muy patrióticos, pero yo no soy americana amigos.
Bueno, que mejor dejo el tema para luego, y nunca mejor dicho. El caso es que ayer fui a comprar el vestido de Homecoming, o por lo menos intentarlo. Después de pasar por el estado "vámonos-de-aquí", por el estado "yo-no-voy-a-homecoming", "olvídate-yo-no-me-pongo-eso" y por el estado "no-me-pienso-gastar-300-dólares-en-un-vestido", por fín encontré algo fiel al estilo europeo. Menos mal, qué alivio. ¿En qué piensan algunos diseñadores cuando hacen los malditos vestidos de Homecoming?. Pero claro, estoy en América, y lo gracioso es que les parecen bonitos a todo el mundo. Pero a mi me da la risa. ¿Qué parte de "estás viviendo en Estados Unidos" aún no has entendido Belén?.
Además, esta semana es la Homecoming Week, y el espíritu Wildcat se nota más que nunca. Cada día de la semana tiene un tema diferente. Hoy por ejemplo, lunes, había que ir vestido de tu deporte favorito. Lástima no tener una camiseta de la Selección Española aquí; se iban a enterar lo que es bueno. Mañana hay que ir vestidos de un dibujo animado o personaje Disney. El miércoles de zombie y el jueves de agente secreto 007. El viernes es el Homecoming game, el más importante de la temporada. Y por lo visto los colores lila y dorado se ven más que nunca. Veremos que encuentro para ponerme que llame la atención pero que no vaya contra mis principios.
La foto es mi ASB card, la tarjeta de estudiante del High School.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Día 49: Sleepless in Seattle

Como ya había dicho, el fin de semana estuve en Seattle. El sábado por la noche lo pasé sentada en una pequeña "playa" con cientos de personas viendo unos fuegos artificiales que representaban algo para los US, pero no me preguntes el qué. Mi domingo se basó en caminar durante 5 pero rápidas horas por las Float Houses del Lake Union. Es el lago que suele aparecer en todas y cada una de las fotografías del downtown Seattle y el emblemático Space Needle. El entorno de este lago está repleto de unas increíbles e unusuales casas flotantes. Sí, así como lo oyes, a mi también me sorprendió. Aquellas que en vez de tener coches a la entrada de sus casas, tienen barcos; y en vez de tener unas vistas a una simple calle, se ven rodeadas de agua divisando los rascacielos de la ciudad de la lluvia, Seattle. Una de las casas que tenía la ruta era la casa en la que se rodó Sleepless in Seattle. No, yo tampoco había visto la película, pero ahora que he estado en ella, me veo obligada a verla. La verdad es que fue un fin de semana muy entretenido hasta que al llegar a casa a las 10 de la noche (demasiado tarde para ser aquí), me acordé que tenía una pila de deberes de historia americana. Pero bueno, supongo que siempre tiene que haber algún pero.Ahora mismo me encuentro escribiendo esto en un Starbucks cualquiera de mi ciudad. Mis únicos acompañantes en estos momentos son mi white moccha frapucchino y el ordenador. Tendría que estar haciendo los deberes, pero supongo que la propiedad conmutativa puede esperar.. jaja. A través de la ventana solo veo lluvia, lluvia que viene acompañada de un sospechoso color gris del cielo. Llueve, sí, creo que hoy se ha acabado el verano aquí. El estado emocional va mejor que nunca. Y creo que eso es posible gracias a los abrazos inesperados de Aimee, a los saludos de la gente cuando me ve por los pasillos o a los guiños de las que se empiezan a convertir en mis amigas cuando me siento en la mesa para comer. Creo que todo eso tiene un nombre: integración.


Hoy ha empezado el club de español y he decidido apuntarme en el último momento; de hecho vengo de él. Mi sorpresa al llegar fue que conocía a un montón de gente, la mayoría eran amigos de Tay, así que genial. Añadirle a todo esto que hoy ha sido Picture Day. La gente iba mejor vestida de lo normal y, como no, mucho más maquillada. Malditos americanos, no sé cuanto dinero se gastarán en maquillajes. Fue muy gracioso escuchar en plena clase de fotografía "junior students whose last name starts with A-F, come to the Sub Building please" y pensar, esa soy yo. Me salté la siguiente media hora de álgebra, estupendo vamos. Te hacían las fotos para la tarjeta de estudiante de OHHS. El día estuvo repleto de "you look so good", "oh, cute outfit", "i love your watch" o "where did you get those shoes??".. jajaja eso es lo que me hace sentirme tan europea. Lo mejor fue cuando esta mañana aparecí en la cocina recién vestida y el padre gritó a los siete vientos "here she's gossip girl!!".. jajaja y es que justamente ayer vimos el primer capítulo de la cuarta y nueva temporada de Gossip.

No sé, creo que esto va viento en popa.

sábado, 11 de septiembre de 2010

Día 47: Let's go cats, let's go WILDCATS!

Estaría bien que hubiera actualizado esto el sábado. Pero sin darme cuenta, el fin de semana pasé de no tener nada que hacer a irme a pasarlo a Seattle.. así que, aquí estoy hoy, lunes 13.

Fútbol, fútbol americano, que no soccer. El viernes fue el primer partido de la temporada para los Wildcats, y fue una auténtica revolución. Cuando aún estaba intentando despertarme a las 7 y media de la mañana por los pasillos del instituto, no veía más que los colores violeta y dorado. Violeta y dorado, violeta y dorado.. Es como cuando fue la final del mundial en España. Pero por lo visto, esto aquí ocurre todos los viernes. "How was your first football game?" me preguntaba todo el mundo al acabar a eso de las nueve y media de la noche. "Exciting? i think so.." respondía. Jaja, la verdad es que te puedo decir que el ochenta por ciento de las gradas no tiene ni idea de las normas del fútbol americano, y lo entiendo; es imposible. La mayoría de la gente se dedica a animar. Además la banda de música da mucho ambiente al juego y por lo menos te mantienes entretenido. Aunque sin duda lo que más entretenida me tuvo fueron las cheerleaders.. sí, aún sigo pensando que estoy en una película. Además casi al final del partido llegaron niñas pequeñitas vestidas como tal, más monas intenta imitar a las verdaderas cheers.. Pero las pocas ganas que tenía de convertirme en una de ellas se me han ido. Estar 2 horas y media dando saltitos y moviendo pompones no es lo mío, más que nada porque lo veo aburrido. Puede ser divertido media hora, pero para de contar.
En cuanto a las clases, cada día es un escalón arriba. Hablo con más gente y mantengo conversaciones mas largas, creo que empiezo a desenvolverme mucho mejor. De hecho me siento muy orgullosa de haber comido hoy con un grupo de niñas diferente al de Taylor y sus amigas. Veo que puedo hacer las cosas por mi misma y supongo que lo aprecio. Después.. mm, puede que el nivel de estudios americano vaya muy por debajo del español, pero se pasan con la cantidad de deberes. Y cuando ya pensé que no podía añadir más peso a mi bolso, me encuentro con un libro de Literatura Americana de 1674 páginas y por si fuera poco uno de Álgebra de 982. Aunque no pudo caber más alegría en mi cuerpo cuando me contaron que podía utilizar el libro online. Menos mal. Me niego a cargar todos los días con esos libros. El de US history parece similar, pero solo pensar en esa asignatura, me mareo. Por cierto, recordáis que tuve que llevar una foto a clase de fotografía, verdad? Pues nos mandó hacer una descripción de ella basándonos en ciertas cosas delante de toda la clase. Casi me muero. Pero cuando la campana sonó, la profesora me llamó. Quería hablar de la foto conmigo, le parecía muy buena e interesante y quería colgarla en una de las paredes de sus clases. Salí del aula más feliz que una regaliz.

Y bueno, este fin de semana lo pasé casi entero en Seattle; es por eso por lo que no me pasée por aquí. Supongo que en un par de días os contaré mis hazañas por ahí..


Ahora sí, me voy a hacer 14 ejercicios sobre unos textos de literatura americana. No puedo estar más contenta.

Por cierto, una de las fotos es el endemoniado mapa del High School.